miércoles, 28 de diciembre de 2011

LA INFORMACIÓN MEDIANTE GRÁFICOS Y LA CASA REAL

Hace algunas semanas leí un estupendo artículo del blog El arte de presentar: "4 formas de mentir con gráficos de datos en una presentación" cuya lectura os recomiendo.

El caso es que hoy leyendo los presupuestos de la Casa Real me he encontrado un ejemplo clamoroso de lo que es una mala presentación gráfica. Si damos un vistazo al gráfico que presenta la Casa Real sobre la asignación monetaria recibida en los últimos años:


Nos puede parecer que en el año 2011 la casa real ha reducido drásticamente sus asignaciones del presupuesto del estado. Si pasamos a analizar los datos numéricos, que también están presentes en la web de la casa real:

Anualidad
Importe
2007
8.289,97
2008
8.663,02
2009
8.896,92
2010
8.896,92
2011
8.434,28

Pues la verdad es que tampoco nos aportan mucha información inmediata, pero desde luego sobre la gráfica podíamos apreciar que en el año 2011 se reducía la asignación de una forma importante, pero numéricamente ha pasado de 8.896 m€ a 8.434 m€, que tampoco es una exageración, precisamente.

Añadimos ahora a la tabla una columna de variación porcentual, con respecto al año anterior:


Anualidad Importe %
2007 8.289,97
2008 8.663,02 4,50%
2009 8.896,92 2,70%
2010 8.896,92 0,00%
2011 8.434,28 -5,20%


Y vemos que la reducción realmente es del 5,20% que está bien, pero no es la impresión que nos habíamos llevado al observar la gráfica.

Ahora pasamos a rehacer la gráfica, pero está vez ponemos atención en poner el origen del eje y en 0.


Desde luego la información gráfica aportada es distinta. Mucho me temo que en la Casa Real han dejado el gráfico tal y como lo entrega la hoja de cálculo, sin poner mayor atención.

Referencias: "4 formas de mentir con gráficos de datos en una presentación"

miércoles, 14 de diciembre de 2011

EL PRECIO EN LAS ORGANIZACIONES CAPITALISTAS (IV)


Valor percibido por el Consumidor.

En anteriores entradas vimos que el punto de equilibrio del mercado se produce en la intersección de la curva de oferta con la demanda "ceteris paribus". La condición ceteris paribus implica que esto será así, si no cambian ninguna del resto de posibles variables, que es tanto como decir que esta representación matemática (o gráfica al menos) es mentira, ya que me parece tremendamente improbable que esto sea así en el mundo real. Pero al menos es cierto que esta interpretación propia de las primeras escuela neoclásicas puso de manifiesto la elección del consumidor ("Ley de las utilidades marginales 
decrecientes").

¿Que es la utilidad percibida por el consumidor?

Evidentemente se trata de algo subjetivo que tendremos que evaluar en cada caso, o al menos en cada grupo de consumidores. Esto nos da algunas pistas de por qué el marketing moderno trata de segmentar al mercado en distintos grupos, ya que al menos es una burda aproximación a los deseos individuales, o de por qué Amazon hace algunos años mostraba precios de libros distintos en función del consumidor que accedía a la compra del mismo libro.

Pero en el acto de adquisición de un producto o servicio y por tanto en la fijación de la utilidad, interviene también la comparación con el resto de productos sustitutivos o equivalentes al nuestro. Tratemos de darle una forma matemática sencilla a todo esto.

Si queremos que un determinado consumidor compre nuestro producto "a", frente a otro "b" de la competencia, es evidente que la utilidad de nuestro producto ha de ser mayor o al menos igual que el de la competencia. De esta forma

Utilidad a >= Utilidad b

Si la utilidad para el consumidor la percibimos como la diferencia entre el valor que él asigna al producto y su precio real, podemos escribir:

Valor a - Precio a >= Valor b - Precio b

De aquí podemos despejar el precio de a, como forma de evaluar el precio al que podemos vender nuestro producto:

Precio a <= Valor a - Valor b + Precio b


Precio a <= Incremento de utilidad + Precio b


Es decir que el precio de nuestro producto en el mercado tendrá que ser como mucho igual al incremento de utilidad percibido sobre la competencia, más el precio de la competencia.
Como puede verse, esta visión está completamente desligada de los costes, y más nos vale que seamos capaces de producir a costes inferiores a "Precio a", calculado de esta forma, porque si no, si permitís la frase, "no vamos a vender ni una escoba", o lo que es peor, si vendemos, "perderemos hasta la camisa".

Es interesante el caso particular en el que no existe competencia. Entonces:

 Valor b = Precio B = 0

Y de aquí se desprende que Precio a <= Valor a. O lo que es lo mismo, que tendremos que vender a un valor igual o inferior al precio asignado por el consumidor. Tenemos un gran ejemplo reciente. ¿Cuanto vale un aparato plano, liviano, táctil y que se parece mucho a un ordenador? El valor, en unidades monetarias que un consumidor asigna a un elemento que no tiene competencia, y que además es novedoso, como regla general es grande. Lo cierto es que desconozco el dato, pero estoy seguro de que el precio de venta de un i-pad está muy por encima de sus costes. Preguntas de este tipo podemos hacernos infinidad de ellas: ¿Cuanto vale un concierto de Michael Jackson?, y.... ¿Cuanto cuesta?

martes, 29 de noviembre de 2011

EL DINERO DE LA CRISIS

Es curioso como muchos de nosotros desconocemos como funciona nuestro sistema monetario, y pensamos cándidamente que el dinero es el papel moneda que circula entre nuestras manos. El siguiente  vídeo de youtube describe magníficamente, de una forma fabulada, como se formó nuestro sistema monetario y como funciona.



Pues bien, una vez que tenemos claro que el dinero que manejamos hoy en día es fiduciario, es decir, no respaldado por ningún activo subyacente, y que este se crea y se destruye en función de la deuda, hay que medir periódicamente cuanto "dinero" hay en el sistema.
Para ello se emplea lo que en economía se llama un "agregado". Agregado es un conjunto de elementos de la misma naturaleza o ligados a un mismo concepto, reunidos con el objeto de obtener una estimación de un conjunto que no es directamente accesible para una observación o medición. De esta forma se habla de la demanda agregada para agrupar la demanda producida por el consumo, más las inversiones de las empresas, más el gasto público y más la balanza comercial. En el caso que nos ocupa los agregados monetarios miden a distintos niveles cuanto dinero hay en el sistema. Estos agregados monetarios son:
  • M0: Efectivo en manos del público. Monedas y billetes de curso legal en manos del público.
  • M1: M0 + los depósitos a la vista en las entidades de crédito, excluidas las administraciones centrales, en entidades emisoras. 
  • M2: M1 + los depósitos de ahorro en entidades de crédito. Incluye los depósitos a plazo hasta dos años y los depósitos disponibles con preaviso de hasta tres meses.
  • M3: M2+ depósitos a plazo y otros pasivos bancarios. En estos últimos, las cesiones temporales de dinero, las participaciones en fondos del mercado monetario y los valores que no sean acciones y tengan una vida superior a los dos años.
El agregado de más amplio uso por los bancos centrales es M3, usado por el BCE (Banco Central Europeo) para vigilar la inflación. Usando una ecuación muy simplista, si M3 crece, lo hace la inflación, porque al haber más dinero en circulación, este vale menos. Repito, muy simplista.

Si observamos una gráfica de variación porcentual mensual de la masa monetaria M3 de los últimos 30 años (disponible en  la sede electrónica del BCE) podemos intuir cuando comenzó la crisis actual y su profundidad:
En noviembre del 2007 la masa monetaria crecía a un ritmo del 12,4%, sin embargo en diciembre de 2009 (donde obtuvo su cuota más baja) se destruía dinero a un ritmo del -0,4%.
Con este gráfico sobre la mesa todavía nos preguntamos:
  • ¿Por qué las entidades bancarias no prestan dinero? . Es evidente... porque no lo hay.
  • ¿Por qué el crédito es más caro?. Porque el dinero al ser escaso, tiene más valor.
  • ¿Por qué la inflación no se dispara aunque los precios del petroleo suban?. Porque el dinero es más caro y por tanto cada día se pueden comprar más cosas con la misma cantidad. Aunque una parte importante de los precios estén dominados por el precio del crudo, la destrucción de masa monetaria (o el crecimiento muy moderado de la misma) compensa este aumento.
Ante esta situación caben tres políticas:
  1. Las llamadas políticas neoliberales. Ajustar el déficit público y corregir el sistema a base de grandes esfuerzos. Inconveniente: grandes esfuerzos a la población.
  2. Las llamadas políticas keynesianas. Inyectar dinero al sistema imprimiéndolo y comprar deuda pública o incluso activos financieros con este dinero. Inconveniente: posible hiperinflación
  3. Romper el sistema y rediseñarlo. Inconveniente: grandes incógnitas.
La historia económica de la humanidad está llena de grandes ejemplos de estas tres políticas y cada pueblo ha sufrido en sus carnes alguna de ellas. Los alemanes sufrieron la hiperinflación de los años 20 y los estadounidenses las políticas neoliberales aplicadas por Hoover en los primeros años de la crisis del 29. 
Con estas lecciones bien aprendidas, EEUU ha optado por las QE (Quantitative easing) inyectando dinero al sistema y Europa y Angela Merkel por las restricciones presupuestarias. Sólo el tiempo da y quita razones...

Quizá esta visión es extremadamente simplista y es criticable desde muchos aspectos, pero es evidente que nos da algunas pistas.

Hay todavía una cosa que me preocupa. La cantidad de dinero especulativo que hay en derivados financieros, que es muchísimo más grande que el PIB mundial, y ese dinero corre un elevado peligro de destrucción. Y es que la economía hace ya mucho tiempo que no es un juego de suma cero...

lunes, 21 de noviembre de 2011

EL PRECIO EN LAS ORGANIZACIONES CAPITALISTAS (III)

EL PUNTO DE EQUILIBRIO.
Tal y como hemos hablado en las entradas anteriores, el primer escalón que las sociedades capitalistas consideraron a la hora de analizar la fijación de los precios en el intercambio de bienes o servicios, fueron los costes incurridos para producir esos bienes o servicos.

Estos costes se interpretó que eran crecientes, o más bien, que el rendimiento obtenido añadiendo más factores de producción era decreciente, en lo que se dio en denominar "ley de los rendimientos decrecientes". A nivel microeconómico es fácilmente interpretable, ya que una vez superado el punto donde las economías de escala reducen los costes, estos suben de manera inexorable porque las sinergias no están tan claras. Todos hemos podido experimentar en la empresa esta ley, en la que por ejemplo, con dos horas de mano de obra producimos una cantidad "x", y con 4 horas, no necesariamente conseguimos una cantidad producida de "4x", si no más bien inferior.

El siguiente escalón que hubo que subir en la fijación de precios consistió en abandonar la visión completamente anclada en los costes para pasar a contemplar la visión de la demanda y por tanto la psicología de los individuos, según la cual la satisfacción lograda mediante el consumo de un bien aumenta con el incremento del consumo, pero este aumento de satisfacción se produce a un ritmo decreciente, de tal manera que se presenta una saturación progresiva, pero nunca total. Esta ley psicológica, se denominó "ley de la utilidad marginal decreciente".

Es decir, el primer vaso de agua que tomamos, nos proporciona mayor utilidad que los sucesivos, ya que nuestra sed va mermando, de forma que si por el primer vaso de agua estamos dispuestos a pagar 5€, por el segundo estaremos dispuestos a pagar una cantidad inferior a 5€ y por el tercero una cantidad inferior a la pagada por el segundo.

Tenemos pues, por una lado una "función de producción" creciente y por otro lado una oferta decreciente. De esta forma, el punto de equilibrio del mercado se daría en la intersección de estas dos curvas.

Vamos a verlo en un ejemplo: construyamos las curvas de demanda y oferta con un ejemplo sencillo basado en el mercado eléctrico.

Supongamos que existen tres empresas eléctricas decididas a vender su producción de la siguiente forma:
  • La Electrica 01 quiere vender 10 MW (Megavatios) a un precio de por lo menos 10 c€
  • La Electrica 02 quiere vender 20 MW (Megavatios) a un precio de por lo menos 30 c€
  • La Electrica 03 quiere vender 10 MW (Megavarios) a un precio de por lo menos 40c€
Supongamos que existen otras tres empresas que desean comprar con las siguientes necesidades:
  • La Empresa 01 quiere comprar 10 MW por debajo de 10 c€
  • La Empresa 02 quiere comprar 10 MW por debajo de 20 c€
  • La Empresa 03 quiere comprar 20 MW por debajo de 40 c€

Es evidente que las posibles negociaciones que pueden establecerse serán largas y las posibilidades, a poco que el número de empresas que concurren en el mercado sean más, aumentarán drásticamente. 

Si construimos las curvas agregadas de oferta y demanda, resultará un gráfico de este estilo:

 

Vemos que el punto donde se intersectan ambas curvas es de 20 MW intercambiados a un precio de 30 c€. De hecho el mercado Ibérico de electricidad funciona exactamente de esta forma, tal y como podemos ver en la siguiente gráfica extraída de página web de la empresa gestora del mercado. En la línea roja podemos ver (tras algunas correcciones) la energía intercambiada y su precio.


LA MARGINALIDAD EN MICROECONOMÍA
El concepto marginal, aplicado a la economía, se refiere a que un determinado parámetro está situado en el límite o en el margen. Por ejemplo, si nuestro contrato de suministro de agua potable pagamos 30€ al mes de "fijo" más 2€ por cada m3 consumido, si en un determinado mes consumimos 10 m3, el precio medio pagado por m3 de agua es PM = (30+2x10)/10 = 5€, mientras que el costo de ese m3 adicional es de 2€, o lo que es lo mismo el coste marginal del m3 de agua es de 2€; ni que decir tiene que en este caso particular, el precio medio del agua irá descendiendo, hasta que en el límite el precio medio se igualará al precio marginal. Otro ejemplo son las bolsas de plástico de los supermercados. Poder acceder a la primera bolsa de plástico es costoso, porque implica comprar en ese supermercado, pero una vez estamos en la caja ¿cual es el precio marginal de cada una de ellas? 0€. De hecho, dadas la implicaciones medioambientales que tienen estas bolsas, la única forma de que el consumidor perciba el coste asociado a las mismas y por tanto reduzca su consumo ha sido cobrarlas.
Esta marginalidad es aplicable tanto al coste, como a la utilidad obtenida por un individuo y por tanto a la demanda agregada.

jueves, 27 de octubre de 2011

EL PRECIO EN LAS ORGANIZACIONES CAPITALISTAS (II)

En la anterior entrada analizamos el precio desde el punto de vista de la teoría clásica, y aún así pudimos ver que el coste no es algo fijo, si no que más bien evoluciona constantemente, no sólo con la variación de costes del mercado, sino con la propia evolución de nuestra organización.

Vamos a analizar en esta entrada la técnica de fijación de precios a la inversa. Esta fijación de precios es propia en las operaciones B2B y en particular ha sido ámpliamente utilizada en España por ejemplo en el sector de las energías renovables, en el que el beneficio que obtendría el inversor por la instalación y puesta en producción de la central fotovoltaica estaba claramente legislado y por tanto también el precio de adquisición pasó a estar claramente determinado. Otro ejemplo claro es  la distribución mayorista, en el que el propio fabricante fija el PVP, vendiéndole al distribuidor mediante un descuento que se convierte directamente en el margen sobre las ventas.

En este tipo de operaciones nuestro cliente va a obtener una utilidad perfectamente cuantificable en unidades monetarias de nuestro servicio o producto.

Pues bien, si somos capaces de averiguar la utilidad en unidades monetarias que nuestro cliente va a obtener sobre nuestro producto o servicio, podemos inducirle a fijar su margen. Este margen puede oscilar desde el 15% sobre la venta en sectores púramente industriales al 50% más propio del sector retail.
Es decir, si sabemos que nuestro cliente puede vender nuestro producto o servicio por 100 €, por qué no inducirle a que lo compre por 85 €, con lo que su margen bruto será del 15%, aunque nuestros costes sean de 5€. Evidentemente esta situación será la deseada por todos los empresarios.

Aquellos que defienden los mercados perfectos me responderán que esa situación tenderá a desaparecer     porque el propio mercado se regulará. Es decir, dado que los beneficios son cuantiosos irán apareciendo progresivamente agentes que produzcan a 5€ y vendan a 85€. Cuantos más agentes aparezcan, evidentemente más competencia existirá, iniciando los precios un descenso hasta llegar a una situación de precio de venta de 5€ + 15%  = 5,88 (Por ejemplo).

Si atendemos a la definición de mercado perfecto: "Es aquel en el que la información sobre las condiciones (calidad) de lo que se negocia es la misma para todos los oferentes y demandantes (no hay información exclusiva o privilegiada) y la información de Precios y volúmenes está también al alcance de todos."

Mucho me temo que los mercados perfectos, como casi todo lo que lleva asociado este adjetivo, tan sólo existen en los libros. Para que un mercado sea perfecto, como indica la propia definición, la información debe ser simétrica y abundante, y como todos sabemos esto en la realidad no ocurre nunca. De hecho el ser humano lleva siglos tratando de aprovechar los sesgos de información en su propio beneficio.

Esto nos lleva a que cada negociación deberá de llevar asociado un precio distinto, idea tan en boga hoy en día, ya que esto conlleva maximizar los márgenes posibles de las organizaciones empresariales. La idea de un único precio para el mismo producto es propia de la sociedad industrial. La actual sociedad de la información nos permite fijar un precio distinto para cada consumidor.

En la siguiente entrada daremos un repaso a la teoría de los mercados marginalistas. Esta forma de fijación de precios es usada actualmente en los mercados de energía. La famosa subasta de electricidad que tanto nos afecta, funciona de esta forma.

viernes, 16 de septiembre de 2011

EL PRECIO EN LAS ORGANIZACIONES CAPITALISTAS (I)

En un sistema económico capitalista los precios que pagamos por los productos y servicios que compramos trasmiten mucha información. Sin embargo en nuestra mentalidad de consumidores perdura todavía el concepto de precio heredado de la revolución industrial. Es decir, tenemos tendencia a pensar que todavía existe un anclaje del precio de venta sobre los costes. Habitualmente pensamos que la formación del precio es del tipo "coste más beneficio que quiere obtener el empresario". Es cierto que actualmente el precio de venta tiene un anclaje importante sobre el coste del mismo, pero no es la única forma de determinarlo.
En estas fechas se emite en televisión un magnífico anuncio que ilustra perfectamente el concepto, resumiendolo de forma concisa  con la frase "El mismo hotel, la misma experiencia pero dos precios".
¿Qué expresa este anuncio?. Muy sencillo, que un artículo o servicio vale lo que alguien está dispuesto a pagar en cada momento por el. O lo que es lo mismo, estamos dispuestos a pagar por un artículo una cantidad proporcional al beneficio o satisfacción que obtenemos por dicho artículo o servicio. Y evidentemente, como la satisfacción que obtenemos es subjetiva, hay tantos precios como consumidores. Ejemplos clásicos de estas técnicas de fijación de precios son:

  • Billetes de medios de transporte.
  • Habitaciones de hotel.
Tanto en uno como en otro ejemplo, el precio dependerá de la anticipación en adquirirlo y la época del año en el que lo hacemos.
Demos una vuelta más a la teoría clásica de la formación de precios. El precio de venta deberá de cubrir al menos los costes directos y los indirectos en los que incurrimos para fabricarlo. Supongamos que una empresa tiene unos costes indirectos anuales de 1.000.000 € anuales. Esta empresa ha presupuestado una producción anual de 1.000 unidades, con lo que la cantidad de dinero que repercute en forma de costes indirectos sobre cada unidad producida es de 1.000 €. Si suponemos también que los costes directos en los que se incurre para fabricar una unidad son de 4.000 €, es evidente que el coste de cada unidad producida es de 5.000 €. Supongamos ahora que los beneficios que queremos obtener por unidad vendida son de 1.000 €. Obtener el precio de venta se reduce a sumar 4.000 + 1.000 + 1.000, de forma que el margen bruto operativo por unidad vendida es de 2.000 €.
¿Qué habrá ocurrido cuando se vendan 500 unidades?
Pues que el margen bruto operativo será de 1.000.000 €, es decir, igual a los gastos indirectos presupuestados.
500 unidades es pues, el punto de equilibrio para los datos presupuestados. Aquí aparece el concepto de coste marginal. Es decir ¿Cual es el coste de producción de una unidad adicional a partir del punto de equilibrio?. Pues tan solo 4.000 €, ya que los gastos indirectos se encuentran ya "amortizados". A partir de este punto la empresa podrá tomar varias decisiones:
  • Mantener el precio de venta.
  • Disminuir el precio de venta con objeto de conseguir mayor cuota de mercado.
  • Aumentar el precio de venta con el objetivo de maximizar los beneficios, asumiendo la posible pérdida de volumen de ventas, debido al aumento de precio.
Pocas organizaciones se resistirán a modificar su precio de venta, una vez alcanzado su punto de equilibrio. La toma de una u otra decisión, la mayor parte de las veces dependerá de la elasticidad de la demanda.
Esta técnica es usada masivamente en el sector retail y es el origen de las tan conocidas rebajas al final de temporada.
Esto implica que la primera barrera tradicional que se impone al precio de venta, para no perder dinero al menos, son los costes directos. Es decir, es posible vender por debajo de los costes indirectos, pero nunca por debajo de los costes directos, si se quieren obtener beneficios, al menos.
Además, vender por debajo de los costes indirectos puede implicar pérdidas, pero estas estarán limitadas siempre a un porcentaje entre el 0 y el 100% de los costes indirectos, mientras que vender por debajo de los costes directos implica que cuanto más se vende, más se pierde.
Esta visión del precio, aunque algo más elaborada, sigue estando anclada al coste, un coste que evoluciona en función de las ventas, pero coste al fin y al cabo.
El siguiente paso que dieron las organizaciones empresariales capitalistas es tratar de adivinar cuanto queremos pagar cada uno de nosotros por el producto o servicio que recibimos, de forma que a cada consumidor se le cobra una cantidad distinta por el mismo producto, que maximice los beneficios de la empresa. En la siguiente entrada analizaremos algunas de estas técnicas. Y es que como decía un buen compañero "te mueves más que los precios..."

jueves, 17 de marzo de 2011

El apagón del 15 de Febrero

Hace tiempo que tengo ganas de comprobar que tal fue el apagón convocado para el pasado 15 de febrero de este año 2011. Para saber si la convocatoria tuvo alguna repercusión he comprobado los consumos nacionales (disponibles en Red Eléctrica) entre las 21:50 (10 minutos antes de la convocatoria) y las 22:30 (hora en la que finalizaba). Estos consumos los he comparado con otros martes del mes de febrero y el mes de marzo (el consumo eléctrico es tremendamente estacional).
Antes de realizar cualquier análisis debemos de considerar algunos factores:
  • El día de la convocatoria del apagón se jugaba el partido de futbol correspondiente a la Champions League entre el Schalke 04 y el Valencia, lo cual no favoreció, evidentemente, la convocatoria.
  • En invierno, y a partir de las 22:00 siempre se produce un repunte del consumo debido a la entrada de las tarifas nocturnas para calefacción.

Si observamos el gráfico comparativo de los consumos en los martes 8,15, y 22 de febrero y 1 de marzo observamos que el repunte de consumo debido a las tarifas nocturnas se ha producido en todos los días analizados, o más bien, en todos ellos (salvo el día 15), más que un repunte se trata de un cambio de pendiente en la gráfica descendente.

La disminución de consumo producida entre las 21:50 y las 22:00 fue en todos los martes analizados de:

es decir que realmente si parece que algo de incidencia si tuvo la convocatoria, ya que el descenso de consumo producido el martes 15/02/2011 es un 34% más acusado que el mayor descenso del resto de martes analizados. ¿Podemos tratar de cuantificar cual fue el número de hogares que siguieron la convocatoria?.

Si consideramos que el decenso de consumo que debería haberse producido es la media de 1,89; 2,77 y 2,23 %, entonces nos deberíamos encontrar con una caida del 2,30%. Por tanto el consumo en MW que debería haberse dado en España a las 22:00 es de 37.575 MW, en lugar de los 37.028 MW que se dieron.

Es decir una diferencia de 547 MW. Si además consideramos que el consumo medio de una vivienda en España a las horas en las que estamos realizando el análisis (y por hacer números redondos) puede estar próximo a 1 KW, entonces el seguimiento de la convocatoria puede cifrarse en unos 547.000 hogares.

Por último, y según datos del INE de 2001, el número de hogares en España era de 14,1 millones de hogares, podemos obtener una incidencia de la convocatoria del 3,8%.

Bien, he de decir que esperaba una incidencia algo mayor, pero también he de confesar que cuando me asomé a la ventana, en los edificios próximos vi las mismas luces de siempre.

¿Qué puede significar esto?. Bueno, tengo la impresión de que esto es bastante subjetivo, pero a mí me parece que al final no estamos tan cabreados como podría suponerse, porque seguimos siendo una sociedad occidental bien alimentada y tampoco vamos a andar apagando la luz y perdernos nuestro programa favorito por unos "eurillos" de más que pagamos en el recibo.... pero insisto, esto es mi opinión...

domingo, 6 de febrero de 2011

¿Publicidad lícita y moral?

Hoy comiendo en Elx me han contado una cosa a la que me ha costado más de unos minutos poder darle crédito. El hecho de que la persona que me lo ha contado tenga cierta credibilidad y no sea muy dada a las fabulaciones ha hecho que por fín se lo conceda. No obstante hay que tener en cuenta que es posible que en la trasmisión haya habido cierto ruido y se hallan tergiversado algunas cosas o símplemente que no dispongamos de toda la información.
Esta persona tiene un amigo en Alicante, al parecer contratado por Aena como figurante.... si, si.... he dicho como figurante. Según me han contado el trabajo de este hombre consiste en llegar al aeropuerto de Alicante a determinada hora, vestirse con el atrezzo que le proporcionan, el cual incluye una maleta tipo trolley y pasearse durante 8 horas por el aeropuerto de Alicante....este hombre en cuestión tiene el turno de de jueves y viernes y al parecer hay bastantes más figurantes dedicados a esta labor.
La verdad es que por mucho que pienso, no encuentro un motivo razonable para fingir en un aeropuerto un tráfico que no tiene.
Al viajero que usa el aeropuerto le da igual el tráfico que tenga, ya que las razones que le habrán impulsado con toda probabilidad a usar ese en concreto, serán la proximidad a su destino o lugar de partida en combinación con motivos económicos, o algo tan simple como que el vuelo hacia ese destino en concreto sólo sale desde ese aeropuerto.
Por tanto me quedan tres opciones de semejante figuración:
  • La primera es que va dirigida a las compañías que operan en este aeropuerto, o a los operadores turísticos para generar una sensación grande tráfico.
  • La segunda es que va dirigida a los turistas que aterrizan en el citado aeropuerto para generar una sensación favorable al destino al que se acaba de llegar.
  • La tercera, y siendo el caso del aeropuerto de Alicante el de un aeropuerto recien reformado, el de generar ante los usuarios y medios una sensación de uso importante, con objeto de justificar las inversiones realizadas.
Es posible que sea sólo una cuestión de un análisis tendencioso o sesgado por mi parte, pero desde luego cualquiera de las posibilidades anteriores no se me antojan demasiado halagüeñas para la acción en concreto, y solamente la segunda pueda parecer más benigna.

En cualquiera de los casos, ¿no sería más rentable invertir en acciones publicitarias que de verdad generasen más tráfico, en vez de fingirlo?. Y lo que es más grave, ¿a nadie se le ha ocurrido esa posibilidad?
Vivir para ver...

jueves, 27 de enero de 2011

El apagón general

Parece ser que para el 15 de Febrero hay convocado por internet un apagón a las 22:00. Vamos, es decir que las 10 de la noche todo el mundo apague las luces, televisores, cadenas, radiorelojes, radiadores, etc., etc.
Bueno para facilitarnos la labor, lo más sencillo sería acudir al guadro general de nuestra vivienda y sencillamente pulsar sobre el botón del diferencial para dejar de consumir electricidad en nuestra casa en cuestión de milisegundos.
Lo que ya no tenemos muy calibrado es las repercusiones que este gesto (aparentemente sencillo), tendría. Esto me recuerda un poco la famosa frase de Mao: "si todos los chinos se pusieran deacuerdo para dar una patada en el suelo al mismo tiempo, la tierra se saldría de su órbita".
El sistema eléctrico español (y en general cualquier sistema eléctrico) se manteniene siempre en un dificil equilibreio de frecuencia y tensión, y mantenerlo estable es labor de Red Electrica (REE). Esto es debido a que la electricidad no se puede almacenar, por lo menos de una forma sencilla, y por tanto el consumo en cada momento debe corresponderse con la generación de electricidad. Si a esto le añadimos un complicado sistema de compraventa de energía (el pool), la gestión y la estabilidad del mismo se complica bastante.
Bien, el caso es que a la hora planeada, una parte muy importante del consumo corresponde a las viviendas y que por tanto una acción bien coordinada de apagón desestabilizaría por completo el sistema eléctrico. Pensemos que hay centrales de generación cuyo apagado es rapidísimo, pero otras como las nucleares, cuyo apagado o salida de producción es mucho más lento. No soy un conocedor profundo del sistema eléctrico nacional, pero un colapso de este estilo llevaría horas poder reponerlo.
Es curioso como la gente común seguimos manteniendo en nuestras manos una cuota muy importante de poder, tan sólo es que ese poder consiste en la unión... y eso se nos olvida.
Este post no quiere animar a la gente para que se adhiera a esta acción, tan solo quiero apelar a su responsabilidad y que seamos todos conscientes de las consecuencias que una acción bien coordinada traería consigo.
Por cierto, si alguien quiere seguir en directo el consumo electrico de este pais, el día convocado o cualquier otro día, se puede ver en: https://demanda.ree.es/demanda.html

miércoles, 5 de enero de 2011

La subida de la luz

Últimamente los comentarios sobre el coste de las renovables en el recibo de electricidad se suceden y algunos son más desacertados que otros. Por fijar un poco las ideas:

- Las renovables abaratan el coste de compra de energía en el pool, ya que entran a cero.
- Las renovables encarecen la parte de tarifa de transporte regulada, ya que los productores de régimen especial cobran primas, cuyo dinero se obtiene precisamente de la tarifa. El peso de las primas a renovables en la tarifa de peaje regulada es del 37%. Es decir que encarecen esa tarifa en un 37% el conjunto de energías de regimen especial.
- En el recibo de la luz, los porcentajes vienen a ser más o menos 50% de tarifa y 50% de repercusión de la energía.
Con lo cual podemos intuir que las renovables encarecen el recibo de la luz, en la medida que se puede entrever que el encarecimiento de tarifa que producen es superior al abratamiento que producen en el pool. La diferencia entre esos dos conceptos es lo que nos cuesta a la sociedad tener energías renovables.